"Ha habido varios diluvios en la Tierra"
pastor Eli James
Miré a la tierra, y he aquí que estaba asolada y vacía; y a los cielos,
y no había en ellos luz. Miré a los montes, y he aquí que temblaban, y todos
los collados se cimbreaban. Miré, y no había hombre, y todas
las aves del cielo se habían ido. Miré, y he aquí el campo fértil era un
desierto, y todas sus ciudades eran asoladas ante la presencia de Jehová,
delante del ardor de su ira. Porque así dice Jehová: Toda la tierra será
asolada; pero no la destruiré del todo. Por esto se enlutará la tierra, y los
cielos arriba se oscurecerán, porque hablé, lo decidí, y no me he arrepentido,
ni desistiré de ello. Al estruendo de la gente de a caballo y
de los flecheros huye toda la ciudad; entran en las espesuras de los bosques, y
suben a los peñascos; todas las ciudades fueron abandonadas, y no quedó en
ellas morador alguno.
Jeremías 4:23-29
“La Edad del Primer Mundo terminó
también en un diluvio cataclismico, pero no el mismo donde se salvó Noé. El
diluvio del tiempo de Noé ocurrió, durante la Segunda Edad del Mundo, y después
de la caída, la encarnación en la carne y la incursión de los vigilantes
durante el tiempo de Jared,...”
Zen García Hijos de Dios
Lo que la gente NO piensa es que ha habido muchos diluvios, no sólo unos pocos. La inundación
global fue aproximadamente hace 13.000 años y erosionó la Esfinge egipcia, el
diluvio de Noé fue sólo hace unos 4.000 años.
Revelación
geológica:
Han ocurrido DOS
CREACIONES Y DOS DILUVIOS mundiales.
El diluvio de Noé NO fue global, ya que sabemos que los reyes de Egipto tuvieron una dinastía consistente durante esos tiempos ( y hay muchas otras razones). Hubo un diluvio Global entre Génesis 1 y Génesis 2, aproximadamente hace 13 000 mil años, el diluvio de Noé fue local.
Aquí hay una prueba brillante, de la Biblia y
la geología, demostrando no sólo dos creaciones totalmente separadas, ¡sino dos
destrucciones mundiales! ¡Pocos han entendido esta sorprendente verdad! Ahora,
¡se encuentra revelada frente a todos los que quieran verla!
Por L. E. Torrance
Ahora por primera vez, una de las más fascinantes historias que pueden ser
contadas. La LLAVE para comprender la sorprendente historia de la Tierra ha sido
descubierta.
Contrario a lo que millones se les ha hecho creer, ¡los verdaderos
hechos de la ciencia y la verdad de su Biblia concuerdan! Los teólogos han
mantenido por largo tiempo oculta esta verdad, ella entra en conflicto con sus
enseñanzas. Los profesores ateos la han suprimido, la ciencia se ha rehusado a
creerla. Sólo unos pocos entienden dónde se encuentra la llave que abre la
sorprendente historia geológica de la Tierra.
Ésta ha estado en los DOS
PRIMEROS VERSÍCULOS DE SU BIBLIA todos estos años, y usted tal vez ni lo haya
jamás notado. El FUNDAMENTO del conocimiento. La primera verdad revelada en su
Biblia es: “EN EL PRINCIPIO CREÓ DIOS los cielos y la Tierra” (Gen 1:1). Esta
Tierra fue creada tan perfecta, tan bella, que “las estrellas de la mañana (los
ángeles – Apoc. 1:20), cantaron de alegría” (Job 38:7). Después el siguiente
versículo inspirado de su Biblia revela que, ¡esta perfecta Tierra fue
destruida por una terrible catástrofe! Génesis 1:2 revela, “Y la Tierra estaba
desordenada y vacía”. La palabra hebrea original que los traductores de la
versión Reina-Valera tradujeron como “estaba” en el versículo 2 tenía que haber
sido traducida como “llegó a ser”.
Ésta es también usada en Génesis 19:26,
Génesis 2:7 y en muchos otros versículos bíblicos. Vayamos al ejemplo de
Génesis 19:26. En este versículo la misma palabra hebrea que es INCORRECTAMENTE
traducida como “ESTABA” en Génesis 1:2 aquí se encuentra traducida
CORRECTAMENTE como “SE CONVIRTIÓ”. A Note, Dios advirtió a Lot y a su esposa no
mirar atrás mientras escapaban de la ciudad ardiendo de Sodoma. La esposa de
Lot desobedeció este mandamiento y miró atrás con tristeza a la malvada ciudad
de Sodoma, y “ella SE CONVIRTIÓ en una estatua de sal” (v. 26). Obviamente la
esposa de Lot ¡no había sido siempre una estatua de sal! Pero cuando ella pecó,
llegó a ser o se convirtió en una estatua de sal. De igual forma, ¡la Tierra no
fue creada originalmente en desorden y vacía! La traducción correcta de Génesis
1:2 del hebreo original inspirado lo deja claro: “La Tierra SE CONVIRTIÓ
desordenada y vacía”. Esta verdad es más clara aun cuando notamos en Génesis
1:2 que la palabra en español “desordenada” fue traducida de la palabra
original hebrea “tohu”, la cual significa “desolación” o “confusión”.
¿Es Dios
autor de confusión? El Apóstol Pablo fue inspirado a decir “Dios no es autor de
confusión” (I Cor. 14:33). Isaías dijo “Él (Dios) NO la creó (la Tierra) EN
VANO (“tohu” en hebreo, que es, no en caos y confusión)” (Isa. 45:18). ¡La
Tierra SE CONVIRTIÓ en ese estado! “La escritura no puede ser quebrantada”
(Juan 10:35). El todo sabio Creador, por tanto, no creó inicialmente la Tierra
desordenada ni en confusión. La única conclusión lógica es que ¡la perfecta
creación de Dios SE CONVIRTIÓ en una ruina desolada! Esta verdad es nuevamente
clara cuando notamos la palabra en español “vacía” que fue traducida de la
palabra original hebrea “bohu”, la cual significa “en ruina incomparable”. La
correcta traducción de los dos primeros versículos del Génesis debería ser “En
el principio Dios creó los cielos y la Tierra y la Tierra FUE DESTROZADA
(desolada, en confusión) y QUEDÓ VACÍA (en ruina incomparable), y las tinieblas
estaban sobre la faz del abismo.Y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de
las AGUAS” (Gen 1:1-2) Por qué fue creada la Tierra antes que Adán. Es una
sorpresa para muchos el aprender que antes que esta Tierra fuera creada (Job
38:4-7), Dios creó millones de ángeles para hacerse cargo de su gobierno (Heb.
1:7-14).
Dios puso al gran querubín Lucero a cargo de los ángeles de la Tierra.
Dios le reveló su gran propósito de agregar nuevos miembros a la Familia Dios.
Dios le habló a Lucero acerca de Su propósito de poner al HOMBRE sobre la
Tierra y crear en él un carácter santo y justo al enseñarle a obedecer sus
santas y justas leyes (si usted no entiende completamente el Plan de Dios,
solicite el fascinante folleto titulado “¿Por qué nació usted?”). Pero Lucero
decidió que Dios estaba en lo incorrecto y se rebeló. No estaba contento de
mantenerse como siervo de la Familia de Dios (Isa. 14:12-15, Eze. 28:13-18). No
quería que un mero hombre de carne y sangre eventualmente se levantara sobre él con autoridad y poder como miembro de la Familia de Dios. Lucero permitió que su
mente se llenara de odio y resentimiento. Persuadió a un tercio de los ángeles
a que se unieran a él en un abierto intento de tomar el trono de Dios.
Lucero
atacó el Reino de Dios e intentó tomar su lugar como Gobernador Supremo del
Universo entero (Isa. 14:13-14). Lucero y su ejército de demonios fueron
totalmente derrotados. Cristo dijo “Y les dijo: Yo veía a satanás caer del
cielo como un rayo.” (Lucas 10:18) El sabio Creador arrojó al malvado Lucero y
a sus ángeles rebeldes hacia la Tierra. Lucero entonces se convirtió en satanás, el Diablo. Sus ángeles se convirtieron en seres espirituales dementes
llamados demonios. ¡Note cuidadosamente! Durante la gran batalla entre los
ejércitos de Dios contra satanás y sus demonios la bella Tierra ¡SE CONVIRTIÓ
en un DESASTRE CÓSMICO! Una perfecta creación se convirtió en una desolación.
(Para ayudar a comprender esto mejor, sírvase solicitar los artículos gratuitos
“¿Creó Dios al DIABLO?” y “¿Quién y Qué Fue Jesús antes de Su Nacimiento
Humano?”).
Por qué los Geólogos no entienden la Geología. Los geólogos no
pueden entender los hechos de la geología. Se niegan a reconocer que durante la
rebelión de satanás y sus demonios en contra de Dios, la Tierra existente antes
de Adán ¡fue destruida! Con este conocimiento se puede explicar claramente lo
que ocurrió con los reptiles, diferentes especies de animales y plantas que
fueron enterrados repentinamente en las rocas sedimentarias y que
posteriormente conformaron los mantos de carbón que hoy conocemos. Otro punto
que debemos destacar y que confunde a los estudiosos de la Geología es que el
diluvio de los tiempos de Noé enterró los restos del hombre, mamíferos de
sangre caliente y muchas otras criaturas como fósiles al cubrirlas con rocas
sedimentarias. Estos depósitos posteriores a Adán, en la mayoría de los casos,
quedaron sobre la parte superior de las rocas sedimentarias formadas por la
catástrofe anterior a Adán, pero en ocasiones, los depósitos del diluvio de Noé
se decantaron en la superficie de la piedra original de la tierra y depósitos
anteriores, siendo arrastrados por la inundación, quedaron finalmente
invertidos, mezclando así la evidencia fósil.
Ahora que sabemos lo que la
Biblia revela, que una creación pre-adámica fue destruida por una catástrofe
mundial debido al pecado de satanás y sus ángeles, podemos entender la historia
geológica de la Tierra. Prueba del diluvio pre-Adámico. Note los verdaderos
hechos de la geología. La catástrofe pre-adámica involucró agua. Comenzó
primero destruyendo mediante las agitadas aguas, a las criaturas más pequeñas
del mar, como lo demuestran los asentamientos en las capas sedimentarias. Las
criaturas más grandes de la Tierra, por otro lado, pudieron dirigirse a los
montes más altos. Estos animales no se ahogaron sino hasta que las aguas del
diluvio aumentaron y, entonces cubrieron la Tierra entera. Geólogos
evolucionistas han encontrado pruebas de este diluvio pre-adámico.
Saben que
esta elevación de aguas del diluvio primero sacaron a los habitantes más
remotos de los océanos, los trilobites y los braquiópodos así como otras
criaturas marítimas con coraza. Los habitantes de las profundidades del mar
fueron esparcidos sobre extensas áreas. Más tarde otras rocas sedimentarias con
vida terrestre se encontraron sobre ellos. Eso explica exactamente por qué
fósiles de criaturas marinas, tales como los trilobites, REPENTINAMENTE
APARECIERON como fósiles en lo MÁS PROFUNDO de las rocas sedimentarias. No
sabiendo que la Biblia revela una catástrofe pre-adámica que destruyó toda
vida, un sorprendido geólogo evolucionista exclamó: “… la REPENTINA APARICIÓN
DE FÓSILES en el Cámbrico (la roca más baja dónde se puede encontrar vida) es
impresionante” (Dunbar, “Geología Histórica”, p 125). [Énfasis nuestro en el
artículo entero].
¿Por qué estos geólogos evolucionistas se sorprenden al
descubrir que fósiles complejos aparecen repentinamente en las profundidades de
las rocas sedimentarias? La teoría de la evolución ha llevado a los geólogos a
asumir que las rocas más antiguas y profundas fueron formadas durante varios
millones de años. Asumen que en la profundidad de las rocas encontrarían
remanentes de fósiles muy simples en etapas evolutivas. Obviamente, debido a la
teoría de la evolución, esperaban encontrar formas simples de fósiles que
claramente mostrarían los pasos de la evolución en ellos. Debido a que la
evolución nunca ha ocurrido, ¡fallaron en encontrar formas simples de
pre-trilobites en evolución! Como el bien conocido geólogo evolucionista Stokes
dijo, “… no entendemos por qué los fósiles de marinos invertebrados (sin columna
vertebral) repentinamente llegaron a ser tantos…” (Stokes, “Hechos esenciales
de la Historia de la Tierra”, p 186).
¿Por qué no pueden entender? Estos
geólogos han estado enseñando que debemos creer que los fósiles fueron
apareciendo gradualmente sobre incomprensibles y largos periodos de tiempo.
Además han estado enseñado que estos fósiles evolucionaron de algunas otras
formas fósiles más simples. Se encuentran sorprendidos de que esas formas
simples no puedan ser halladas. No obstante, ¡No desisten de su preciada teoría
aunque las evidencias muestran que está incorrecta! Demostramos en un artículo
anterior el por qué los fósiles en una escala mundial pudieron sólo haber sido
creados por un diluvio mundial. Es obvio, por tanto, que las formas fósiles APARECERAN
REPENTINAMENTE en lo más bajo y profundo de las rocas ¡debido a que una
destrucción pre-adámica los cubrió primero! No hay manera de explicar esta
muerte REPENTINA de tantas criaturas complejas en las profundidades de las
rocas sedimentarias de la Tierra sino a través del hecho obvio que una
destrucción pre-adámica por agua, repentinamente cubrió esas criaturas
produciendo su posterior fosilización.
Pruebas de las crecientes aguas
fluviales. Se ha encontrado que los primeros depósitos sedimentarios geológicos
están compuestos de finas partículas con pocos signos de vida escondida. Esta
es una acumulación natural de erosión en el mundo pre-adámico antes de la
horrible catástrofe ocurrida. Repentinamente los depósitos se volvieron ásperos
y contenían muchos fósiles. Los habitantes de las profundidades marinas fueron
usualmente enterrados primeramente en las capas profundas del sedimento.
Entonces las crecientes aguas fluviales de aquella primera destrucción
cubrieron las plantas de las orillas. Dunbar reporta que geólogos han
encontrado en la siguiente capa sedimentaria más alta “fragmentos de plantas
terrestres” así como formas fósiles de “escorpiones y milpiés” (“Geología
Histórica”, p 171).
¿Evolucionaron estas plantas, escorpiones y milpiés por largos
periodos de tiempo a partir de los trilobites? ¡No! ¡Todas estas pruebas
fósiles demuestran que ellos repentinamente murieron! Si la vida evolucionó,
¿por qué las alas emplumadas (y muchas otras características) aparecen en vidas
fósiles TOTALMENTE DESARROLLADAS? ¿Por qué no se han encontrado restos fósiles
de etapas transitorias entre las alas de piel de los reptiles voladores y las
alas emplumadas de las aves? Si la vida evolucionó lentamente de lo simple a lo
complejo, ¡entonces habría un gran número de etapas intermedias o variedades a
partir de las especies fijas! Conforme las crecientes aguas fluviales
comenzaron a elevarse, pequeñas plantas de las orillas y animales fueron los
siguientes en ser enterrados y convertirse en fósiles.
Las pruebas geológicas
demuestran que conforme las aguas pre-adámicas continuaron incrementándose, un
vasto número de peces sin escamas fueron prontamente enterrados en el barro y
el limo, las cuales formaron la base para la siguiente capa sedimentaria. Son
tantos los peces fosilizados que se encuentran en las rocas formadas en esta
etapa de la destrucción pre-adámica que los geólogos explican su existencia
señalando que éstas llamadas rocas Devonian fueron formadas en “la Era de los
Peces” (Stokes p 227.) no hubo “Era de los Peces”, sólo un tiempo cuando un
vasto número de peces murieron en el mar. El creciente diluvio devastó junglas.
Las poderosas aguas fluviales que no fueron sino una parte de la destrucción
pre-adámica se elevaron cada vez más y más alto cubriendo las junglas y la
tierra. Esta catástrofe sumió y arrasó con bosques enteros. Las plantas
arrasadas fueron acumulándose en grandes montones y cubriéndose con enormes
capas de barro y limo. Estas masas de vegetales fueron después aplastadas por
el peso del barro y el limo. Hoy día las conocen como los yacimientos de carbón
de las llamadas “rocas” paleozoicas. ¡Carbón formado por un diluvio
pre-adámico! ¿Saben los geólogos que el carbón fue formado por este diluvio pre
adámico?
El geólogo evolucionista Stokes, hace esta sorprendente declaración,
“aunque todos los factores biológicos, geográfico y climáticos fueran
favorables, el carbón no puede haber sido formado si no hasta que grandes masas
de plantas fueran sumergidas y enterradas por los sedimentos. (“Esenciales de
la Historia de la Tierra, p 216). En otras palabras, este geólogo evolucionista
admitió que el carbón puede ser formado sólo cuando grandes masas de plantas y
árboles fueron arrastrados por una corriente de aguas fluviales y cubiertas con
capas de barro y limo. Stokes explicó el por qué los yacimientos de carbón NO
PUDIERON haber sido formados por los bosques y junglas alternadamente creciendo
y hundiéndose bajo los océanos por un largo periodo de tiempo. Sin embargo, es
esa ficción la que es enseñada en los colegios.
El dijo “No pudo la tierra
haberse alternadamente levantado y hundido, porque un yacimiento de carbón para
ser preservado debe permanecer PERMANENTEMENTE enterrado y, así mismo, no puede
sobrevivir expuesto a la erosión (“Esenciales de la Historia de la Tierra” p.
215). En otras palabras, la única posibilidad de que los yacimientos de carbón
puedan ser formados es gracias a que grandes cantidades de materia vegetal sea
puesta junta, depositada en un solo lugar y entonces prontamente sea cubierta
con grandes capas de barro y limo, lo que comprimiría las grandes masas de
plantas, permitiendo con el paso del tiempo que se trasformara en mantos de
carbón. A muchos les consta que el carbón NO está siendo formado en las junglas
de la tierra hoy en día.
El ciclo de la vida de las plantas es simple, nacen,
mueren, decae y terminan siendo humus. ¡Es obvio que el carbón no está siendo
formado ahora! Antes que el carbón pueda ser formado, los restos de plantas
deben no sólo ser cubiertos rápidamente para prevenir su descomposición, sino
deben ser cubiertos lo suficientemente PROFUNDO para que tantos millones de
toneladas de sedimentos transformaran el carbono de estas plantas en carbón. La
destrucción pre-adámica es el único medio posible por el cual el carbón
encontrado en la Tierra hoy pudiera haber sido formado. ¿Qué mayor prueba de un
diluvio pre-adámico necesitan los geólogos evolucionistas antes de que puedan
admitir los verdaderos hechos que nos muestran que la ciencia está de acuerdo
con la simple y pura verdad de la Palabra de Dios? Las crecientes aguas
fluviales arrasan las Plantas. ¿Qué se supone encontrar preservado como fósil
conforme las aguas se elevaban sobre los montes y planicies?
Los animales
veloces huirían hacia lo más alto de los montes hasta que fueran ahogados.
Nótese también que animales más grandes flotarían más que los pequeños pero
comparativamente más pesados, tales como los trilobites. ¿No esperaría que los
reptiles voladores fueran capaces de escapar de crecientes aguas fluviales por
más tiempo que las formas marinas con coraza? ¡Eso es lo que justamente
ocurrió! Stokes declara que en el llamado Jurásico –una etapa posterior de
destrucción—“…reptiles con alas de piel llamados “pterodáctilos” tomaron el
aire” (“Esenciales de la Historia de la Tierra”, p. 278). Dese cuenta que estos
reptiles voladores no evolucionaron en aves, como los evolucionistas asumen --
¡Sino comenzaron a CAER DENTRO DE LAS AGUAS FLUVIALES y comenzaron a ser
enterrados para convertirse en fósiles!
Dinosaurios Exterminados.
Dunbar
también declara, “los dinosaurios se encontraban en sus días de gloria…”
(“Geología Histórica”, p. 306). Lo que él debió haber dicho fue que en las
etapas finales del diluvio preadámico – conforme las aguas fluviales alcanzaban
los más altos montes – los dinosaurios fueron rápidamente exterminados y
enterrados convirtiéndose en fósiles. Dunbar se refiere a esta destrucción
pre-adámica inadvertidamente cuando dijo, “A través de la larga Era Mesozoica…
los reptiles dominaron completamente la vida en la Tierra, pero viendo más de
cerca su dinastía REPENTINAMENTE SE COLAPSÓ” (“Geología Histórica”, p 404).
Otro geólogo utilizó esta declaración. Walther llamó a esta repentina
destrucción de los dinosaurios “el tiempo de la gran caída” (Dunbar, “Historia
Geológica”, p. 348).
El geólogo evolucionista G. G. Simpson deja claro que los
geólogos no entienden qué ocurrió. Dijo, “… el más controvertido evento en la
historia de la vida sobre la Tierra… es el cambio del Mesozoico, la Era de los
Reptiles, a la… era de los Mamíferos” (de “Mamíferos y Puentes Terrestres”,
Washington Acad. Sci. Jour., Vol 30, pp 137-163). Los geólogos reconocen que
algo drástico ocurrió durante el tiempo que las rocas de la superficie de la
era pre-adámica (la llamada Era Mesozoica), fueran cubiertas. Fallan en
reconocer que estas rocas fueron CUBIERTAS REPENTINAMENTE en vez de haber sido
durante 500 millones de años.
No teniendo el FUNDAMENTO del conocimiento, la
verdad de la Biblia, fallan ulteriormente en entender el hecho de que un
diluvio mundial pre-adámico REPENTINAMENTE exterminó todas las plantas y
animales. ¡Se equivocaron en su cálculo por cerca de 500 millones de años!
Geólogos Confundidos. Cuando Dunbar dijo, “… las hordas de reptiles dieron paso
a un espectacular levantamiento de vertebrados de sangre caliente” (“Historia
Geológica”, p 336), no pudo entender que había encontrado la evidencia de que
una catástrofe mundial había exterminado a estas hordas de reptiles y que Dios
DESPUES recreó el mundo del HOMBRE y los MAMÍFEROS.
Todos los geólogos
evolucionistas reconocen que ALGO DRÁSTICO ocurrió durante el tiempo en que las
rocas de la superficie de la era pre-adámica fueron cubiertas. Pero como no
quieren mirar en sus Biblias, ¡no pueden entender LO QUE PASÓ! Propiamente
entendido, tanto la Biblia y la geología claramente prueban que una catástrofe
mundial destruyó la creación pre-adámica. Los geólogos evolucionistas hoy
encuentran remanentes de fósiles de aquella era en las más profundas y antiguas
rocas sedimentarias. Los registros fósiles dejan claro que los animales más
pequeños fueron enterrados antes que los más grandes y veloces animales que
huyeron de las corrientes de agua a tierras más altas.
El Mundo de la Era
Pre-Adámica NO Revelado. Debido a que la Biblia no nos lo dice no sabemos
cuánto tiempo la Tierra permaneció como paraíso, o cuánto duró la ruina debido
al agua que la cubría. El mundo es ciertamente viejo, pero Dios no permitiría
que estuviera en desolación por mucho tiempo. No obstante la Biblia revela que
hace casi 6000 mil años Dios RECREÓ y REPOBLÓ la Tierra en una semana literal
de 7 días (en éste blog existen artículos que exponen que los 7 días NO son literales, fueron edades).
Puso a Adán y a Eva y las plantas y animales de hoy en esta Tierra y
les ordenó “fructificad y multiplicaos; LLENAD la Tierra” (Gen 1:28). Sólo
1.656 años después de que Adán y Eva fueron creados, sus descendientes se
volvieron tan malvados que Dios nuevamente destruyó el mundo con un Diluvio en
los días de Noé.
Toda criatura viviente de esta segunda creación, del tiempo de
Adán y Eva, fue destruida, excepto Noé, su familia y los animales que él
protegió en el Arca. El Diluvio de tiempos de Noé, el cual ocurrió entre el año
2.370 y 2.369 A.C. dejó un conjunto completamente diferente de capas
sedimentarias y fósiles de aquellas que dejó la destrucción que es descrita en
el versículo dos del primer capítulo del Génesis. Estos dos conjuntos distintos
y diferentes de capas sedimentarias y sus fósiles vinieron de dos periodos de
tiempo completamente diferentes en la historia de la Tierra. Puede prontamente
notar la diferencia entre las rocas del mundo pre-adámico y las rocas
sedimentarias dejadas por el diluvio en tiempos de Noé. Las rocas pre-adámicas
son usualmente tan duras que pueden solamente ser escarbadas con herramientas
cortantes y dinamita.
Pero las rocas sedimentarias dejadas por el Diluvio en
tiempos de Noé pueden ser escarbados con un pico y pala. Los geólogos han
encontrado fósiles de reptiles de sangre fría en las más antiguas y profundas
rocas, pero en aquellas más nuevas los geólogos encuentran fósiles
primariamente de mamíferos de sangre caliente asociados con la era del hombre.
Obviamente, ciertos reptiles de sangre fría fueron creados nuevamente. Así
mismo algunos reptiles parecidos a los dinosaurios pudieron haber aparecido en
la segunda creación (ver “El Diluvio del Génesis”, por Whitcomb y Morris).
Justo como en el diluvio pre-adámico, el diluvio en tiempos de Noé también
enterró la vida marina de corazas duras primero, después los animales más
pequeños que no pudieron huir lo suficientemente rápido para escapar de las
crecientes aguas fluviales. Finalmente, justo como en la catástrofe
pre-adámica, las furiosas aguas fluviales en los días de Noé ahogaron los
animales más grandes y rápidos que habían huido a las cimas de los montes
altos.
El diluvio de Noé enterró primero a las criaturas con caparazón. Los
geólogos evolucionistas nuevamente cuentan la historia involuntariamente.
Stirton dijo, “En áreas protegidas del fino y limoso fondo del mar, donde las
acciones de las olas fueron grandemente reducidas, especies de gasterópodos
“Turritella” (pequeñas formas de conchas marinas) aparecieron en abundancia”
(Tiempo, Vida y el Hombre”, p. 307).
La verdad no es que estas formas
evolucionaron abundantemente, sino que fueron enterradas por millones –REPENTINAMENTE–
por el diluvio de Noé.
Conforme las aguas del diluvio de Noé crecían, los
animales un poco más grandes se quedaron atrapados en las agitadas aguas y
depositados en las capas sedimentarias más altas. Dunbar dijo que entre los
animales habían diminutos caballos, pequeños rinocerontes sin cuernos,
igualmente pequeños tapires, pequeños camélidos, los primeros dientes de
montaña (especie de oveja), ardillas, roedores como los murciélagos y pequeños
primates. Ninguno de ellos alcanza un tamaño considerable, y el mayor de ellos
apenas se empinaba hasta la cintura con un hombre. ("Geología Histórica
", p. 428).
Los evolucionistas mal interpretaron esta evidencia y dijeron
que los fósiles remanentes de estos pequeños mamíferos son prueba de que estos
mamíferos fueron evolucionando de pequeños a otros más grandes. Estos
ligeramente más grandes animales eran aún demasiado pequeños para huir de las
rápidamente crecientes aguas del diluvio de Noé por largo tiempo. Ellos,
igualmente, fueron atrapados en las crecientes aguas fluviales y cubiertos con
barro y limo, a lo mucho unos pocos días después de que las formas de coraza
dura fueran enterradas. No obstante los geólogos hacen teorías de que millones
de años pasaron entre las dos capas más profundas dejadas por el diluvio de
Noé. Más que probar que la evolución tuvo lugar, ¡los fósiles prueban que la
evolución no tuvo lugar! Conforme las aguas del diluvio de Noé continuaron
incrementándose sobre las tierras más altas, los mamíferos más grandes que
habían huido a zonas más seguras fueron atrapados por las aguas remolinadas y
enterrados en el barro y limo.
En las rocas establecidas en la mitad de los
sedimentos depositados por el diluvio de Noé, los geólogos han encontrado,
"animales carnívoros, entre los que estaban los perros, pequeños zorros,
cierto tipo de felinos, los felinos con dientes de sable... pavos salvajes y...
"pecaríes" (Stirton, "Tiempo, vida y el hombre ", p. 324).
Eras Erróneas. Los geólogos falsamente asumen que los mamíferos más grandes
evolucionaron lentamente durante largos periodos de tiempo a partir de los
mamíferos más pequeños. Lo que los registros fósiles realmente prueban es que
¡los mamíferos más grandes MURIERON DESPUÉS! En las capas sedimentarias más
altas del diluvio de Noé (llamadas rocas Miocenas), Dunbar declara que,
“ganado, ovejas y cabras [las cuales] pertenecen a la familia Bóvido, [y] lo
que también incluye al bisonte, la cabra montés, y los antílopes…” son
encontrados (“Geología Histórica”, p. 415).
El ganado, ovejas y cabras fueron
enterradas en las rocas sedimentarias más elevadas dejadas por el diluvio de
Noé debido a que ellos pastaban en las altas planicies y en los valles de las
montañas. Fueron por tanto enterrados en el barro y limo en las últimas etapas
del Diluvio de Noé. No estaban evolucionando, como los geólogos asumieron --
¡estaban ESCAPANDO! Una duda final puede ser fácilmente entendida a la luz de
la Biblia. Lo geólogos no entienden por qué los registros fósiles en las más
altas capas de roca dejadas por el diluvio de Noé presentan alteraciones y se
mezclan algunos fósiles que debieran estar en diferentes decantaciones.
Su
Biblia nuevamente deja clara la respuesta. “Y las aguas decrecían gradualmente
de sobre la tierra…” (Gen 8:3). En otras palabras, por 150 días grandes mareas
iban y venían, mezclando y remezclando el barro de las capas sedimentarias de
las aguas fluviales.
Sí, ¡LA BIBLIA HA SIDO PROBADA! ¡La llave para entender la
geología de las rocas antiguas ha sido al fin revelada! El CONOCIMIENTO ha
estado en la Biblia todos estos años. La Biblia también Revela el Futuro. No
sólo la Biblia revela el pasado, sino también revela el futuro. La Palabra
inspirada de Dios claramente revela una destrucción final – esta vez por fuego
(Apoc. 20:15). Pero la tercera y final destrucción de la Tierra por fuego ¡NO
es el fin de la Tierra! ¡No! Cristo Jesús mostró al apóstol Juan una visión de
un Cielo Nuevo y una Tierra Nueva. Ésta aparecería después de la tercera y
última destrucción mundial. Juan revela lo que vio en visión, “Y vi un nuevo
cielo y una nueva Tierra…” (Apoc. 21:1).
¡Su Biblia deja claro que todo hombre
que haya vivido estará al final ya sea en la Familia de Dios, en esta creación,
o será echado dentro del lago de fuego en la tercera y última destrucción de la
Tierra! La elección es nuestra, ¡El Reino de Dios o el lago de fuego!
Jesucristo hizo escribir al apóstol Juan, “Bienaventurados los que guardan sus
mandamientos, para que tengan derecho al árbol de la vida, y que entren por las
puertas en la ciudad...” (Apoc. 22:14; RV 1865).
Les pusiste término, el cual no traspasarán, Ni volverán a cubrir la tierra.
Salmo 104:9
Con la ayuda de Dios, si
elegimos ahora el arrepentirnos, el VENCER, y el crecer en la gracia y el
conocimiento de Jesucristo, ¡estaremos prontamente sentados CON Cristo y
regiremos las naciones por 1.000 años! (en éste blog existe un artículo de Eli James que desmiente el Milenio literal).
Después de que los 1.000 años acaben
habrá una final resurrección de aquellos que vivieron y murieron en ignorancia.
Dios nos usará entonces para enseñar a cada hombre que haya vivido el camino de
paz y felicidad. ¡Es entonces cuando Darwin aprenderá cuán mal estaba! ¡Es entonces
cuando todos los teólogos aprenderán que la Biblia estaba correcta después de
todo! Aquellos que refuten el creer y practicar la verdad entonces perecerán
por fuego – LA SEGUNDA MUERTE. Todo el que viva y obedezca vivirá y regirá en
una nueva creación.